Ops!  Let's take it easy!...

‍       Nuestro sólido mundo material tiende a transformarse en una

intangible alternativa digital 'e-'.  A 'algoritmarse' y des-materializarse. 

A causa de la disruptiva, exponencial, imparable evolución tecnológica.

De impacto profundo también en las comunicaciones sociales. 

Lo que nos obliga a una constante revisión y actualización de

los clásicos paradigmas del marketing y la publicidad. 

Para preservar su eficacia.  Y adecuar la escala de valores éticos a las 

exigencias de los nuevos sistemas de interacción y comercialización. 

Cada día más influenciados por ultra potente, inanimada, quizás

impredecible, Inteligencia 'Artificial'.

Internet of Things; Augmented Reality; Metaverso; NFTs; Bots;

Fake news. El ‘e-futuro’ nos sorprende y desafía a diario.

La hiperconectividad 24/7 y la creciente multitarea incrementan 

la volatilidad, la distracción, la dispersión de nuestra atención. 

Y nos exponen a un constante bombardeo audiovisual con exceso 

de hipnóticas ofertas de productos y servicios.  Solicitadas o no.

Ofertas a veces subliminales. O distractivas. Y muchas veces confusas. 

Indistinguibles entre ellas. (¡Qué anuncio guay!, pero... ¿era

de tal marca?... ¿o era de tal otra?...)

Lo que dificulta la toma consciente, racional, de decisiones.

>>>Harari sintetiza: "Hoy, tener poder significa saber qué obviar".

Por eso, como siempre, resulta relevante diferenciar las marcas y sus

comunicaciones publicitarias.  Y hacerlo notablemente.

Así, además de crear, desarrollar y posicionar marcas, es vital

sostenerlas en las mentes, hacerlas perdurables, 100% memorables. 

Mantener su liderazgo en diseño de imagen, calidad, credibilidad, 

prestigio y competitividad. Como lo hace magistralmente desde 1976

la más famosa manzana jamás mordida, fruto de purísima Creatividad  

Publicitaria Humana(1).  Algo que en 2024 la Inteligencia 'Artificial'

puede simular pero no sustituir... (aún:)